Freddy no entendía realmente el concepto de gracia. ¿Cómo iba a entenderlo? Las mayores influencias en su vida hasta ese momento no habían compartido o demostrado esa gracia. En cambio, le contaban cuentos con moraleja sobre un mundo duro. Le advirtieron que trabajara duro y lo hiciera bien o acabaría rápidamente en una caja bajo la interestatal. Freddy ni siquiera tenía gracia para sí mismo, sino que se exigía mucho a sí mismo y no confiaba en los demás. Todo esto lo hizo muy pesimista, creyendo que tenia que prepararse para lo peor porque probablemente pasaria. Y como sentía que el mundo iba tras él, creía que la gente, incluso los amigos, sólo eran amables con uno cuando uno tenía algo que ellos querían.
Así que, en su primer año, cuando Tyler Stibrich le invitó a la Iglesia Camino a Damasco, (Damascus Road), en la Universidad de Arizona, Freddy se mostró escéptico. Había crecido en la iglesia, pero no veía ni a Dios ni a la gente especialmente amables o cariñosos. Por alguna razón, fue a algunos eventos y luego comenzó a reunirse con Tyler uno a uno.
Muchas de sus conversaciones iban por el mismo camino. Tyler dijo: "Puede ser un poco agotador intentar animar a alguien que siempre es tan negativo y espera que ocurra lo peor. Podía debatir cualquier cosa positiva que yo intentara decir con que podría descarrilarse horriblemente. Le habían contado una historia tras otra sobre alguien que cometía un error y luego era despedido, abandonado, echado a la calle o incluso asesinado".
Como puede imaginar, estas conversaciones se volvieron agotadoras para Tyler. Asi como eran de agotadoras para Tyler, lo eran aún más para Freddy. Toda su vida estaba llena de este discurso negativo. Freddy sentía que no tenía margen de error en su vida. Tyler lo explicó así: "[Freddy] tenía tanto miedo de que el peor de los casos pudiera suceder, porque para él no había nada que le salvara de sus propios errores". Sentía que siempre estaba a un paso de caerse de la cuerda floja.
Esto duró años. Tyler y Freddy se reunían, Tyler animaba a Freddy y Freddy rechazaba cualquier semblanza de aliento, consuelo o esperanza.
Pasaron los años y Freddy empezó a abrirse a Tyler. Admitió que aunque creció en la iglesia, su percepción de Dios estaba "muy sesgada por el ambiente negativo y vergonzoso" en el que creció. Freddy dijo: "En lugar de un padre celestial que todo lo ama, sólo veía a un viejo gruñón y rencoroso", admitiendo también: "Rara vez oraba porque pensaba que cualquier oración remotamente beneficiosa para mí sería rechazada y se volvería contra mí".
Fue entonces cuando Tyler se dio cuenta de que la vision de la vida de Freddy estaba basada en la verguenza, no en la gracia. Tyler sabia que las creencias de Freddy estaban profundamente arraigadas y que el no podia controlarlas o cambiarlas. Tendria que confiar en Dios para revelar Su verdad a Freddy en Su tiempo.
Fue entonces cuando la Iglesia Camino a Damasco, (Damascus Road), comenzó una serie sobre el libro The Artisan Soul: Crafting Your Life into a Work of Art, (ElArtesano del Alma: Creando Tu Vida en una Obra de Arte), de Erwin McManus. El libro anima a los lectores a recordar que están moldeados según el Creador Supremo, Dios, y que la creatividad y el arte están en nuestro ADN.
Freddy, quien escribe, incursiona en el arte y crea mundos enteros en sus obras de ficción, es muy creativo. A través de esta serie, empezó a ver en sí mismo una característica de Dios, no un dios severo, sino un Padre amoroso. Esta semejanza demostraba su filiación a través de Cristo.
Después de eso, Freddy se involucró más, uniéndose al equipo de alcance, convirtiéndose en líder de equipo, incluso escribiendo una historia en segmentos vinculados a los temas semanales y los debates de la siguiente serie.
Freddy se graduó en diciembre de 2018. Continúa trabajando con Camino a Damasco en el campus mientras busca empleo. La historia de Freddy no termina aquí. Si Dios quiere, su comprensión y experiencia de la gracia continuarán creciendo a partir de las relaciones con personas como Tyler, grupos como Camino a Damasco y la verdadera huella digital de Dios en la vida de Freddy. En sus propias palabras, Freddy dijo: "Todavía queda mucho camino por recorrer, pero es un camino que estoy feliz de recorrer".
En su carta de oración de septiembre, Tyler compartió su relación con Freddy y el trabajo que Dios ha hecho en su vida. Terminó su carta compartiendo una nota que había recibido de Freddy en Navidad. Decía: "Mis padres siempre me decían que si seguía compartiendo mis miedos y preocupaciones, la gente no querría ser mi amiga. Gracias por demostrarnos a todos que estábamos equivocados".