Ben Joseph era hijo de un hindú convertido al cristianismo, nacido en Kerala, India. Aunque se crió yendo a la iglesia, no le interesaba ningún asunto espiritual. En los años 70, empezó a trabajar para un hombre de negocios que ayudaba a enviar gente a Estados Unidos y Canadá. El hombre prometió a Ben que lo enviaría a América algún día, y fiel a su palabra, lo hizo. El hombre de negocios escribió el testimonio cristiano de Ben, lo envió a los institutos bíblicos estadounidenses y suplicó en nombre de Ben que le concedieran una beca para asistir a su escuela y entrar en el ministerio. Ben fue aceptado en un instituto bíblico de Arizona y se trasladó a Estados Unidos. Sólo había un problema: Ben no era cristiano.

Una estafa al descubierto

El colegio descubrió inmediatamente que el testimonio de Ben era falso y no escrito por él. Pero como no podían permitirse enviarlo de vuelta a la India, le permitieron quedarse en la escuela y trabajar en mantenimiento. El sueño de Ben de vivir en Estados Unidos se hizo realidad, pero se encontró en una escuela dedicada a un Dios que no podía importarle menos. Descubrió que muchos de sus compañeros eran falsos y que el cristianismo era una broma.

Aceptar la verdad

Poco a poco, el material que Ben estaba estudiando en clase empezó a pinchar su corazón pecador. Era una sensación abrumadora que se sumaba al aislamiento que sentía por ser un estudiante internacional. En los años 70, no era fácil encontrar una tienda de comestibles que vendiera los alimentos étnicos que te gustaban o permitirse una llamada telefónica con tu familia en casa. Ben encontró amistad en sus compañeros de piso y en la madre de uno de ellos. A pesar de saber la verdad sobre por qué Ben estaba en la escuela, un profesor se convirtió en una figura paterna para él. Mientras todos le consolaban, la palabra de Dios seguía condenándole. Podía ver claramente sus actos de culpabilidad. Un oscuro viernes por la noche, completamente solo, cayó al suelo y suplicó a Dios que le salvara. Esa fue la noche en que Ben se convirtió al cristianismo.

Una abrupta llamada al ministerio

En los años 80, Ben se había graduado en el seminario, se había casado y trabajaba en seguros. Un viejo amigo del seminario, Bob Lehman, se puso en contacto con él. Bob trabajaba para Missions Door y le dijo a Ben que creía sinceramente que Ben debía dedicarse al ministerio. Ben dijo que sí y fue nombrado oficialmente por Missions Door para ser embajador del campus. En 1984, Ben habló en una conferencia donde un pastor en Tempe se le acercó para trabajar con la Universidad Estatal de Arizona. Fue entonces cuando comenzó la idea de un ministerio en ASU dirigido a estudiantes internacionales.

Amigos de los internacionales

La Universidad Estatal de Arizona tiene una media de 9.000 estudiantes internacionales cada año, y esa cifra va en aumento. La universidad cuenta actualmente con estudiantes de 136 países diferentes, lo que la convierte en una de las 10 mejores universidades del país en cuanto a acogida de estudiantes internacionales. Ben entiende perfectamente cómo se sienten muchos de estos estudiantes. Se esfuerzan por mejorar su inglés y a menudo no hablan en su lengua materna. Intentan acostumbrarse a una cultura diferente a la suya. Y a menudo se sienten solos y añoran su hogar. Por eso fundó Friends of Internationals (FOI).

FOI es un lugar donde estos estudiantes sienten que tienen una familia. Es una organización del campus dedicada a compartir la cultura, establecer relaciones y descubrir la verdad. Es donde los estudiantes internacionales pueden reunirse para comer, realizar actividades como senderismo o jugar a los bolos, y visitar magníficos parajes naturales como el Gran Cañón. Es un hogar lejos del hogar. Los estudiantes se relacionan entre sí y también se les asignan familias de acogida estadounidenses con las que pueden vivir o no.

Ministrando a Estudiantes Internacionales

La FOI hace saber a los estudiantes que provienen de un trasfondo cristiano y bíblico. Pero en la FOI, las conversaciones espirituales se centran principalmente en los estudiantes y sus creencias. Los estudiantes hablan de filosofía, moralidad y los fundamentos que construyen sus valores, ya sea una religión o algo totalmente distinto. Son conversaciones profundas que a veces pueden durar horas, ya que Ben y los estudiantes intentan llegar al corazón de por qué existen y cuál es su propósito.

Aunque estas discusiones son una parte integral del ministerio, Ben no está interesado en venderles un producto espiritual. Cree que la palabra de Dios les convencerá y no podrán huir de la verdad. Él quiere desarrollar relaciones significativas con estos estudiantes para que sepan que tienen un amigo de confianza en un país extranjero para ellos. El ministerio de Ben es, en última instancia, cuidar de los estudiantes y hacer vida con ellos. Hace poco, fue al funeral de un amigo de los estudiantes. No vino a predicar un mensaje; sólo a llevar comida y a comer en el suelo con ellos en su casa apenas amueblada.

Evangelizar a los estudiantes del Este

El 84% de los estudiantes internacionales proceden de naciones hostiles o restrictivas hacia los cristianos. Esta parte del mundo se conoce como la ventana 10-40: Oriente Medio, Asia meridional y oriental, y el norte de África. Estas zonas tienen poblaciones mayoritariamente musulmanas, budistas, hindúes o ateas, y son las áreas más difíciles para que los misioneros entren y trabajen. Es de estos países que los estudiantes vienen a estudiar en ASU donde pueden ser expuestos al evangelio.

Ben dice que a muchos de estos estudiantes les cuesta entender la gracia, ya que proceden de religiones que enseñan que Dios se deja influir por las buenas obras. El coste del discipulado también es un tema frecuente, ya que muchos de estos estudiantes podrían perderlo todo si aceptan a Cristo. Pero el impacto que está teniendo FOI es evidente. En su primer año de ministerio, Ben llevó a un budista chino y a su esposa a Cristo. Hoy, ese hombre pastorea una iglesia en California. Recientemente, un estudiante de Ghana (en la foto del blog) visitó FOI para una cena gratis y un evento de discusión. Un año después, aceptó a Cristo como su Señor y Salvador.

Cómo Puede Ayudar

Ben recibe apoyo financiero de Missions Door y dice que le encantaría que rezaran por él. Después de Covid, los estudiantes se reúnen de nuevo en persona, y FOI está viendo números récord como nunca antes. Hay hambre en la mayoría de estos estudiantes porque el campus estaba tan aislado. Oren para que estos estudiantes se mantengan saludables y encuentren el compañerismo que desesperadamente necesitan en FOI.